Ten en cuenta que todas las rutas de cicloturismo de este mapa han sido probadas por nuestros colaboradores, pero funbici.org no asumirá ninguna responsabilidad debido a incidentes que puedan ocurrir durante el viaje en bicicleta. El mantenimiento y la señalización de las carreteras compete a la administración pública, y los ciclistas deben respetar las señales incluso cuando un track pudiera pasar por una carretera incorrecta o prohibida.
- Actualizada: Diciembre del 2019
- Dificultad y Firme: Muy fácil. Prácticamente, la mitad de la ruta discurre en paralelo al río Júcar por pistas de tierra muy ciclables. El resto, caminos bien asfaltados de bajo tráfico.
- Ruta familiar: 100 % libre de tráfico en el tramo que bordea al Júcar.
- Etapas recomendadas: Se puede hacer perfectamente en una jornada.
- Tráfico: Nulo en el entorno del Júcar. Bajo en el resto de la ruta.
- Intermodalidad: Acceso por tren de Cercanías, tanto en Alzira como en Sueca.
- Temática: Paisajística, etnológica, cultural.
- Tipo de Rueda: Se puede realizar con cualquier neumático, si bien se recomienda que tenga algo de taco.
- Extensión: 40 km.
- Geometría: Circular.
- Pernoctación: Alzira / Sueca.
- Servicios: Multitud de servicios de cualquier tipo en las dos principales poblaciones: Sueca y Alzira.
- Temporada recomendable y climatología: Cualquier época del año. En verano deben elegirse primeras horas de la mañana, o al atardecer.
- ¡Quiero conocer más de la Ribera del Xúquer!
- Integración / conexión con otras rutas vertebradoras de la Comunitat Valenciana:
- Marco de colaboración: La ruta se hizo dentro de las Primeras Jornadas de Cicloturismo Ribera de Xúquer que tuvieron lugar en la Ribera Alta a la que Funbici.org (entidad gestora de esta Web) fue invitada como una de las asociaciones referentes de cicloturismo a nivel nacional, y a la que asistieron un total de 20 participantes.
Resumen de la ruta:
Iniciamos la ruta en esta insospechada «Casa Blava» tanto por su ubicación, en la misma ciudad de Alzira, como por la historia que alberga entre sus muros ya que en ella se desarrolló la trama de la obra «Entre Naranjos» (1903) escrita por el famoso escritor oriundo Blasco Ibañez.
De fácil localización y extraordinaria modernidad en sus instalaciones, cabe destacar la utilización de alimentos y productos locales de la zona que vamos a empezar a conocer y deleitarnos en esta ruta.

Nuestras maquinas maravillosas preparadas y equipados para iniciar un soleado día valenciano que hace honor a nuestro clima mediterráneo.

A escasos metros de la ciudad de Alzira podemos empezar a despertar nuestros sentidos con agradables vistas a lo huertos de naranjos que no abandonaremos en gran parte de nuestro recorrido. Campos vistosos,alegres y coloridos en los que el naranja contrasta con la luz azul del cielo mediterráneo.
Todavía en ellos perdura las construcciones de piedra de muretes construidos con la técnica de piedra seca de antaño.


Empiezan a aparecer las plantaciones y campos de caquis que aportan un valor a la economía de estas huertas valencianas ante la bajada del consumo de la nuestra naranjas por su importación desde otros países. Buen momento para escuchar lo que campesinos de allí nos cuentan acerca de la importancia de consumir nuestros productos locales, de km cero, para revitalizar la economía de la la comarca, proteger sus labores y prácticas agrícolas amenazadas, y también contribuir al cuidado de nuestro medio ambiente.
Podemos seguir encontrándonos con extensos y amplios huertos a pie de rodada lo que nos indica lo apacible y tranquilo de este trayecto con sus centenarias, muchas de ellas, casas payesas de huertos burgueses y de labranza. Un nuevo regalo a nuestro olfato es el aroma a azahar de naranjos, mandarineros y limoneros.




Y hemos llegado, entre entre pedalada y pedalada, a uno de los ríos más largos y regulados de España, el Júcar, que desemboca en estas tierras valencianas no sin antes enseñarnos muchos de los secretos que guarda y que estamos dispuestos a descubrir.
Su riqueza paisajística y medioambiental se llena de juncos, sauces llorones, enea o tarai así también como peces bagres, zander, blackbass, carpa crician y anguilas que nos van a permitir saborear una deliciosa y extraordinaria gastronomía culinaria de la zona.
Se despierta nuestra curiosidad al detectar muros y caminos en altura a lo largo de nuestro trayecto que, según nos cuentan, está fundamentado en un sistema de elevación de tierras medieval para evitar inundaciones ante la crecida y desbordamiento del rió y poder así salvaguardar los pueblos ante las posibles inundaciones.
Animamos a nuestros lectores a descubrir cada uno de los matices que encontraremos a ritmo de suave pedalada!


De necesaria cita es la existencia del Centro de Cultivo de peces de aguas templadas de Polinyà del Xúquer como centro de referencia en la reproducción y cría de especies en peligro de extinción: anguila europea, loina del Júcar, samaruc, colmilleja, etc. También de especies autóctonas destinadas a la repoblación fluvial (carpa real y barbo). Destaca a nivel europeo por su éxito en la reproducción y cría de la anguila que da lugar al exquisito plato de all-i-pebre de anguilas.


Llegamos al punto de atravesar canales, acequias y pasos de agua para el riego y cuál es nuestra sorpresa al encontrarnos a personas practicando el piragüismo en un claro ejemplo de recuperación del Júcar como vía verde fluvial, que llevan a cabo integrantes de ecologistas, entidades, asociaciones cívicas, ayuntamientos, y la propia Universitat de València. Todo un valor añadido para aquellos ciclistas ávidos en probar nuevas experiencias deportivas.
Y sorprendidos ante el saludo inesperado de un jinete, seguimos atentos a todas las sorpresas que nos depara esta zona de la ribera del Xúquer.




Tras observar el azud, nos preguntarnos acerca de la importancia de los sistemas de regadío por métodos tradicionales, en los que los azudes junto a la acequias formaban un sistema hidráulico que, además de servir de uso para riego, alimentaba los lavaderos, abrevaderos para animales e incluso se utilizaba la fuerza del agua para los molinos de agua.
En efecto, estos complejos sistemas hidráulicos siguen siendo usados en la huerta valenciana.


Identificamos al fondo el skyline de la localidad de Sueca, ciudad que llegaremos a conquistar en una corta distancia y que se dedica en gran parte al cultivo del arroz y que cuenta desde 1961 con el prestigioso Concurso Internacional de paella Valenciana de Sueca, calificada fiesta de interés turístico nacional con la colaboración de Asociación de cocineros y reposteros de Valencia, y la participación de concursantes internacionales de Europa, América y Japón.
Sueca también es conocida por su Muestra Internacional de Mimo, considerada una de las principales muestras de mimos y danza del mundo. Está dedicada al teatro gestual con representaciones de mimo, pantomima, clown, comedia del arte, y técnicas circenses que se realizan en espacios cerrados y también al aire libre.
Y a medio camino entre la magia, el mimo y la gastronomía, ha llegado hasta nuestros día esa manera tan particular de elaborar la rica Paella Valenciana. El arte culinario se hace fuerte cuando el valenciano se lanza a elaborar una paella:
Si una bona paella vols cuinar, magia i fortuna li has de posar

Seguimos avanzando ya en término de Fortaleny, donde los mejores pescadores de la modalidad cebador practican en las aguas del Xúquer. Aquí se han llegado a celebrar campeonatos mundiales de esta modalidad.

Tomamos buena nota de la reciente creación y acondicionamiento de tramos de carril bici perfectamente integrados en su entorno natural y paisajístico. Nos encontarnos con un precioso puente de hierro rehabilitado que nos permite seguir avanzando sin ningún tráfico rodado y disfrutando de unas preciosas vistas.


Ya en Sueca, cabe citar su Ruta Modernista, con un carácter muy propio, destacando el «Asil dels Ancians Desamparats» como monumento imprescindible, pasando por el emblemático «Jardín del Paseo de la Estación», dónde entre especies centenarias nos encontramos con un busto de Bernat y Baldoví, con el monumento al Maestro Serrano para finalizar con el edificio de las Escuelas Carrasquer (1929).
Necesitados de recuperar fuerzas, nos detenemos en su pequeño pero coqueto mercado central dónde se pueden adquirir productos locales de km 0 y donde cómodamente se recibe información de toda la oferta cultural, turística y festiva de esta interesante localidad valenciana.
Las gentes del pueblo nos cuentan de la existencia de la proximidad del museo del chocolate de la localidad que rinde culto al cacao, gracias al Chocolate Artesano Comes, una fábrica valenciana con historia y tradición en su elaboración. Conocedores de los numerosos beneficios del chocolate para la salud no podemos resitirnos a «tastarlo».
Museo del Chocolate de Sueca – Fuente: https://chocolatescomes.com/museo/

Museo del Chocolate de Sueca – Fuente: https://chocolatescomes.com/museo/

Dominando la iglesia el entorno céntrico peatonal y apacible de Sueca disfrutamos de un descanso para comentar, preguntar y charlar con sus gentes saboreando el momento relajadamente.


Y ya de regreso al atardecer, rodeados de arrozales, mandarinos y naranjos valencianos, y con las vistas del parque natural de la Murta y de Sierra de Corbera con su pico «Cavalld de Bernat», nuestras alargadas sombras se van impregnando de olores de azahares de esta huerta valenciana. Olores que nacen y que esperamos no nos falten nunca…



Bon viatge, cicloturistes!
Track (ruta color verde):
Track en Wikiloc:
Más rutas por la Ribera del Xúquer aquí:
Ermitas de la Ribera Alta del Xúquer – Paraje Natural Municipal “Ullals del Riu Verd”
Alzira – Sueca por el “Valle de La Murta” y la “Muntanyeta dels Sants”
Circular por el Parque Natural de la Albufera de València – El Marjal